martes, 12 de agosto de 2008

DILE A JESÚS QUE TENEMOS HAMBRE

PRÓLOGO.

Este libro es un torbellino de ideas, de pasiones, de sentimientos, es un libro escrito desde lo mas profundo de mi existencia.
Podrá parecer muy ciútico pero es la verdad.
En este libro se conjuga un sinnúmero de particularidades que lo originaron. Estados de ánimo, vivencias, y otros factores.
Cuando comencé a escribir este libro tenía frente a mí la idea clara de lo que quería que fuera. En Dile a Jesús que tenemos hambre, no busco enrostrar en Jesús al responsable del hambre de la humanidad, sino lo que busco es que nos concentremos en el hambre en sí. No hay que preguntarse a quién va dirigido sino que hambre es la que predomina o señala nuestro camino.
El título de esta obra está basado en un diálogo de la película Las cenizas de Ángela, en donde hacían referencia a Jesús para que saciara su hambre, mi referencia hacia este personaje no es directa ni ha querido serlo nunca, es un eco de resonancia, un nombre a través del cual pueda enfatizar lo que realmente importa: el hambre.
Para darle un mayor significado, quise dividir esta obra en dos partes. En la primera muestro los frutos del hombre y me concentro en aquellos frutos que están en uno pero que no los aceptamos porque se consideran repudiados por la sociedad, pero no hay que hacerse los tontos, es muy fácil hablar sobre el amor, la libertad, la paz, que son ideales que todos anhelamos pero hablar y señalar como frutos del hombre la envidia, la pereza, la ira y otras cualidades, en tiempos de la Inquisición habría sido un motivo de perseguimiento. Espero no estar en tiempos de Inquisición. La segunda parte es el resultado dela mezcla de todos los frutos del hombre antes mencionado en la primera parte, con la característica que he decidido darle vida a personajes de la vida cotidiana, sin nombres, para que cada uno se identifique con ellos, pero tan reales, tan honestos, tan vivos que representan el sentido de este libro que es el hambre como centro de la vida.
Por último puedo señalar que este libro ha dejado fuera al alter ego que llevo, no es un libro de viajes ni de aventuras, es totalmente emotivo con las correspondientes consecuencias que trae dicha situación.
He decidido arriesgarse escribiendo poesía, pues este es mi primer poemario, ya que mis dos primeros libros son del género narrativo, es un riesgo que he decidido tomar, porque mi escritura y especialmente este libro es para mí, es mío.
No sé si escribo poesía para desahogarme, pero ha sido una salida perfecta.
Este libro fue escrito en una semana, una semana intensa llena de emotividad cargada de un corazón que necesitaba revelarse, explotar desahogarse, en otras palabras vivir.
Lo importante que deben rescatar de este libro es cuál es su hambre. De qué hambre tienen necesidad, porque la humanidad se caracteriza por ser hambrienta por no decir famélica.
Por primera vez dejé a un lado a mi alter ego y soy yo, Juan Pablo Cifuentes, el de carne y hueso, quien escribe esta parte de mi vida.


Yumbel, jueves 07 de diciembre del 2006.



















A laurita mi niña
guíame desde el universo.

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